por una de ellas pasa un cauce de agua
donde hay un área de campo natural. En
esta fracción se realiza la cría, en la cual
pastorean 70 vacas y vaquillonas entora-
das sobre 24 ha de campo natural y en 10
ha de alfalfa. En la otra fracción hay un
60% del área destinada a la recría e inver-
nada de terneros y terneras.
Se trabaja con la raza Aberdeen Angus.
En general solo se recría e inverna lo pro-
ducido en el predio y no se compran ani-
males. Las terneras de reposición se re-
crían en el área de invernada, de manera
de darles prioridad en la alimentación. Se
utilizan para reposición las más pesadas
del lote, las que entran al entore con 15
meses, el resto de las terneras se venden
gordas para faena.
En el área de cría se manejan todas las
categorías juntas: vaquillonas, vacas de
primera cría y vacas multíparas. El pro-
ductor reconoce que de esta manera no
se puede realizar un orden de prioridad
en la alimentación de las categorías en
desarrollo, con lo cual todas las catego-
rías permanecen en buen estado durante
todo el año. Este manejo es con el fin de
simplificar el trabajo.
El entore va desde el 15 de noviembre
hasta febrero, cuando las terneras al pie
de la madre comienzan a mostrar celo,
por el desarrollo precoz que adquieren
por la buena alimentación. Las paricio-
nes se producen temprano y de manera
concentrada. Por el estado de los vientres
se logran buenos porcentajes de preñez
(más del 90%) y al inicio del entore.
Manejo de las pasturas
Fabián realizó un curso de invernada
del Plan Agropecuario en la localidad de
Palmar, Río Negro en el año 1997. Práctica-
mente todos los manejos que hoy realiza
en el predio son con fundamento de lo
aprendido en ese curso.
Lo primeros pasos fueron el aprender
a manejar el alambrado eléctrico a la
perfección, para mejorar el uso de las
pasturas.
Las praderas se manejan pastoreando
en parcelas, con 3 a 4 cambios por día,
lo cual genera una altísima carga ins-
tantánea. Con este manejo, el productor
considera que se utiliza mejor la pastu-
ra (asume un 80-90% de utilización del
forraje), se controla el meteorismo y se
controlan malezas, ya que el animal con-
sume la totalidad de la planta y no selec-
ciona. Mediante este sistema de pastoreo
se logran largos períodos de descanso y
cortos períodos de pastoreo, lo cual favo-
rece a la productividad y persistencia de
las plantas.
Se destina un área total de 68 ha para la
ganadería. Como puede observarse en el
gráfico N°1 hay un 32% de esta área des-
tinada a cultivos de verano para alimen-
tación del ganado. Se siembran 9 ha de
sorgo granífero, destinados a la cosecha
de grano húmedo para suplementación
animal y 6 ha de sudangrás. El primer cor-
te del sudangrás se usa para enfardar y
luego se evalúa en función de la dispo-
nibilidad de forraje de las praderas, si se
pastorea o se realiza silo pack. El produc-
tor considera que este tipo de suplemen-
to es caro, pero no se puede enfardar en
seco debido a la época del año (otoño).
En general se siembran cultivos de vera-
no para mantener la dotación y cuidar las
praderas.
Praderas de alfalfa
Consideramos relevante hacer un apar-
tado del manejo en las praderas de alfal-
fa, debido a la superficie que ocupa en el
predio y por el efecto que puede generar
el mal uso de esta especie.
Se prepara el suelo con herbicidas
respetando los tiempos para posibilitar
que la tierra se “suelte”. Se realiza siem-
bra directa, a una densidad de 12 kg/ha
(cuando son sembradas puras). Se utiliza
la variedad Chaná, ya que el productor
considera que es la de más fácil acceso y
adaptada a la zona.
La fertilización se realiza todos los años
Grafico N°1
. Uso actual del suelo en el área ganadera
41%
9%
35%
2%
13%
Alfalfa
Sudangrás
Campo natural
Raigrás y avena
Sorgo granífero
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