Colaboro en las planillas pasando a la
computadora los datos de esta técnica
(FAMACHA).
En los partos ayudo a mamá a agarrar y
a intentar sacar al cordero.
Tengo dos ovinos. Una la tengo acá en
el campo porque es cordero y la otra en-
carnerando. Vendí la primera cordera que
tuve que es melliza de la que está en el
campo y vendí un macho el año pasado.
Decidí comprar unos juguetes y cosas
para la escuela.
Me llama la atención el parto. Siempre
de noche salimos a recorrer cuando es la
parición. Inclusive para el cumpleaños le
compramos a papá una linterna que llega
a la casa del vecino.
¿Cuál es su visión del ovino en San
José y Canelones? ¿cuáles son las
perspectivas?
JC. San José como Colonia, Canelones,
inclusive Montevideo rural tiene una
gran fortaleza, tienen mucha población
rural con predios pequeños, donde la
economía se complementa con la acti-
vidad asalariada y con alguna actividad
granjera o agropecuaria. Ahí hay gente
que quiere trabajar.
Por otro lado, tiene una muy buena
situación para la producción de forraje.
Pequeños predios que se dedican a la
lechería, quesería artesanal, a engordar
terneros en pequeños predios familiares.
Entonces si nosotros unimos que hay
gente que está radicada en el predio,
donde son buenos productores de forra-
je, y que ese forraje puede ser convertido
en carne de cordero de primera calidad,
es una gran alternativa de producción.
Es muy difundido hoy por la prensa que
está abierto el mercado de Estados Uni-
dos para el acceso de carne ovina con
hueso y que hay posibilidades de abrir
más mercados.
El rubro ovino es gran productor de
carne por hectárea en un breve período
de tiempo, creo que las perspectivas del
rubro son enormes, hay muy buenas po-
sibilidades.
¿Qué es lo que falta para todo eso?
Que se empiecen a dar los negocios. A
raíz de que está abierto un mercado lo
que empieza a jugar ahora es la activi-
dad de los privados tratando de desarro-
llar ese acceso al mercado. Que exista la
posibilidad de que los actores a través
de la industria puedan empezar a de-
mandar ese tipo de producto, el cordero
de buena calidad, ya que un animal de
pocos meses y de muy buena calidad de
carne, es apreciada por algunos merca-
dos.
Creemos que es un rubro que tiene un
buen margen económico para trabajar y
es muy buen complemento para la fami-
lia. A nivel familiar queremos dedicarnos
a esto por muchos años más.
Reflexionando
“Ayer estuvimos” en un sistema pro-
ductivo ovino, donde se pueden obser-
var roles asignados en la familia a partir
de explotar las fortalezas de cada uno,
haciendo más fácil y viable conseguir
objetivos. Temas “en carpeta” como el
recambio generacional, se estimulan al
promover la participación del joven en
actividades que más le llaman la aten-
ción en el predio.
La toma de decisiones basadas en ex-
periencias previas, “sacándole jugo” a
aquellas ramas agropecuarias como la
horticultura y lechería, se incorporan a
una nueva mirada del rubro ovino en el
sur del país.
En condiciones de suelos con mucha
fertilidad, una historia de manejo de
pastoreo y con rápido acceso a mercado,
no es desorbitado pensar en una elite
de productores dedicados a la cría ovina
que acompase las nuevas demandas de
calidad de carne.
Foto N°3. José Manuel ayudando a su padre.
Foto: Plan Agropecuario
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