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Educación Física con 29 años y vive
en Buenos Aires.
En los años que trabajó allí apren-
dió muchas cosas y creó un fuerte
lazo de amistad con Tomasito que lo
acompañó siempre.
Su explotación propia, comenzó
con 71 há, parte de las cuales se las
compró al padre, pero con muy bajos
valores del ganado y con escasos re-
cursos, no alcanzaba para la familia.
En ese entonces una empresa im-
portante de Rivera (Viana) le ofre-
ce que los represente en la zona
comprando lanas y cueros, lo cual
le generó el ingreso necesario y lo
permitió conocer “el mundo de los
negocios”.
Tiempo de cambios
Pero el principal cambio que él re-
conoce, que lo llevó a donde está
hoy, fue en el año 95, “cuando los
argentinos vinieron a comprar terne-
ros que determinó un fuerte incre-
mento de los precios”.
Además simultáneamente “apare-
cieron los técnicos, que nos enseña-
ron como producir”, dice don Ruben,
mostrando esa modestia que men-
cioné antes.
Es por ese entonces que desde la
Facultad de Veterinaria, con un grupo
de docentes de Paysandú, me tocó
coordinar un curso semipresencial
de “Producción ganadera”, donde
Nelita y Ruben estaban en primera
fila siempre.
También en esos tiempos, el “nue-
vo” Instituto Plan Agropecuario, se
acercó al establecimiento de don
Ruben y al grupo al que pertenecía.
Desde entonces, siempre ha sido un
excelente anfitrión para las jornadas
y cursos que las instituciones le pro-
ponen.
”Yo tenía tantas ganas de aprender
y estaban los técnicos para ayudar-
me, que se me abrió la cabeza”…
dice don Ruben refiriéndose a ese
período.
La experiencia de trabajar en gru-
po fue muy buena; el técnico (Carlos
Vera) no siempre fue bien compren-
dido, pero para don Ruben fue un
gran apoyo.
En el año 98, Juan Martín (el hijo
del medio), terminó el liceo, hizo el
curso de Inseminación Artificial y se
incorporó a la explotación.
El emprendimiento genético
Un hecho fortuito, lo llevó a un em-
prendimiento genético, que hoy es un
pilar de su sistema de producción: ha-
bía comprado 3 toros en una cabaña
de la zona, pero por diferentes moti-
vos el entore fue un fracaso, así que
se decidió a crear un pequeño plantel
para producir sus toros.
Compró unas vaquillonas Aberdeen
Angus en “La Coqueta” y rápidamen-
te comenzaron a sobrarle algunos
toros, de manera que todos los años
vendía 3 o 4 toros a los vecinos.
Más adelante compró unas vacas
pedigree y algunos embriones, de
los que nacieron “Primitivo” el primer
toro PI y “Secundina”, la primera vaca
de pedigree.
En el 2006 murió el padre de Nelita
y recibieron 170 há, de manera que la
explotación alcanzó 365 há actuales
(con algunas otras fracciones que fue
adquiriendo).
El plantel de pedigree fue crecien-
do y desplazando al ganado general,