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nacidas está muy lejos del ideal,
que para el caso de alfalfa pura se
consideró necesario alcanzar las 350
plantas/m2.
Cómo se determinan él o los pro-
blemas:
El resultado anterior determina que
existieron algunos problemas y no
se alcanzó el objetivo buscado. Para
descubrir cuáles fueron la o las po-
sibles causas, debemos comenzar a
analizar y cuestionar algunos de los
siguientes pasos que se llevaron a
cabo en todo el proceso:
a) confirmar la calidad de la semilla
usada. Comprar una semilla etique-
tada, el productor tiene la posibili-
dad de hacer un reclamo al vende-
dor por intermedio de INASE; para
este trámite es necesario contar con
la etiqueta de la semilla sembrada y
la boleta de compra, la cual especi-
ficará el número de lote; con estos
datos se podrá rastrear el origen de
esa semilla;
b) en qué condiciones estaba la
cama de siembra, cantidad y calidad
de rastrojo en superficie;
c) humedad del suelo al momento
de la siembra;
d) cuál fue la situación climática
luego de la siembra (lluvias, tempe-
ratura);
e) la inoculación (para legumino-
sas) y curado de la semilla;
f) el estado de la sembradora;
g) profundidad que se colocó la se-
milla en el surco;
h) capacidad del operario para rea-
lizar la actividad responsablemente;
i) presencia de malezas y plagas
(ej. Isocas, Grillos y/o Babosas) en
los primeros días del nacimiento. Es
importante analizar cada una de es-
tas variables, ya que los resultados
pueden atribuirse a una de ellas o a
la acumulación de pequeños errores.
Comentarios generales
Estas dos acciones presentadas en
este artículo, son una parte de todo
un proceso de planificación y acción
que hacen una correcta gestión, para
lograr una siembra de praderas de
calidad.
Cuanto más objetivo y exactos sean
los datos utilizados para la aplicación
de cierta tecnología, mejor serán los
resultados y si estos resultados son
evaluados, la mejora será continua.
En cuanto a las pasturas sembra-
das hay muchos datos que hay que
investigar y adaptarlos a nuestras
condiciones pero es mejor empezar
con algo, que seguir cometiendo los
mismos errores.
Recordar:
Una semilla etiquetada es garantía
de calidad, lo que implica desechar
la compra de semilla entre vecinos,
cuya calidad no es conocida ni garan-
tizada.
Al momento de cambiar alguna tec-
nología o proceso, es aconsejable
comenzar por las cosas que están
funcionando mal o son muy com-
plejas; en cambio cuando algo anda
bien, es sencillo y se obtienen resul-
tados aceptables, mejor no cambiar.
Por este motivo si en el sistema
se observan problemas de implanta-
ción es recomendable comenzar por
definir correctamente la densidad de
siembra y una posterior evaluación
de los resultados. Luego de estos
análisis y revisar todos lo ocurrido
con anterioridad, junto al personal
competente, para determinar cuáles
son los pasos o procesos que se de-
ben mejorar y lograr en un sistema
más confiable y eficaz.
Para lograr una buena gestión, es
necesario contar con datos objeti-
vos, certeros y analizar los resulta-
dos, para de esa manera poder me-
jorar los procesos involucrados.
En síntesis:
Pensar el objetivo de la pastura,
elegir las especies y variedades,
preparar correctamente el suelo,
decidir la cantidad de semillas a
sembrar, elegir una buena fecha de
siembra, utilizar equipos adecuados,
capacitar al sembrador y evaluar los
resultados.
Agradecemos los aportes de los
Ings. Agrs. Ariel Asuaga y Mario Pau-
letti.
42 % de nacimiento
30+35+27+40+25+20+15+28+39+35 =
294
294 plantas en 10 muestras
10 muestras = 2 m
2
Este número de plantas, lo divido entre 2
294/2 = 147 planta por m2
Esquemas.
350 semillas/m2 (POBLACION OBJETIVO) ---- 100
147 semillas/m2 (REALES) ---- X
X = (147 x 100) / 350