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« Previous Page Table of Contents Next Page »10 DE CASA
chas veces estábamos de acuerdo, pero el productor con alguien debían hacer catarsis. Nosotros escuchába-mos y terminábamos en una buena relación porque en el fondo estaba la mística que hubo siempre. En los últimos años hay una bo-nanza económica que ha colaborado para la mejoría de los productores, pero si en algún momento se termi-na, hay que estar preparados para ayudar a la gente ante situaciones de crisis, darles opciones para tomar decisiones. El productor ganadero es un gran sobreviviente, no queda-ron ahí por casualidad, pero también es cierto que muchos productores quedaron por el camino. Siempre dije lo mismo, una cosa es que se vaya por decisión propia y otra es irse expulsado.
Es bueno que las nuevas genera-ciones sepan que no debe de haber nada más conmovedor y más trau-mático que enfrentarse a una familia que está perdiendo todo su capital debido al endeudamiento que había generado y no tener soluciones pro-ductivas que brindarles. Hay que ser muy insensible para no conmoverse. Los técnicos del Plan no lo éramos; formábamos parte de ese medio. Exactamente lo mismo nos pasaba cuando ocurría una sequía o venían inundaciones. Nadie que no haya en-frentado esa situación puede darse cuenta de lo que estamos hablando.
¿Respecto al manejo ante las se-quías se aprendió algo?
Yo siento que en algunos puntos medulares ocurre lo mismo que an-tes con el agua; el 95% del agua de lluvia se pierde. Me acuerdo que en la sequía actuamos rápidamente. El Ministerio liberó la frontera y el gra-no de Argentina ingresó para racio-nar el ganado, facilitamos el trasla-do de reservas forrajeras de zonas menos críticas que no habían sido afectadas, hacia zonas más compro-metidas. Esos fenómenos que antes se daban cada 20 años, hoy ocurren mucho más seguido.
Hoy hay más información, hay que usarla para prevenir. Si la sequía ya
está instalada ¿para qué sirve hacer un tajamar?, hay que intervenir para que en vez de aprovechar un 5% del agua llovida, se aproveche al menos un 15%. Luego de conocer otros paí-ses donde el agua falta, nos damos cuenta del derroche que hacemos nosotros.
Me acuerdo que en esa época tra-jimos a un especialista israelí para asesorarnos sobre manejo de agua. No daba crédito al ver el agua que teníamos disponible. El Plan trabaja-ba con PRENADER, además el Plan tenía un equipo de aguas, estaba Oxacelhay, Labrot, Koolhaas, etc. Los técnicos de campo cuando te-níamos una inversión que se vincu-lara al agua, llamábamos a los espe-cialistas para que lo hicieran.
¿Cómo se desvinculó del Plan?
Un día me llamaron y me dijeron que no se renovaba mi contrato; así me fui del Plan. Al día siguiente me llamó el Ministro Gonzalo González para ofrecerme desarrollar el siste-ma de trazabilidad en Uruguay. Ese mismo día también me llamó el Pre-sidente de Allfex para Latinoaméri-
ca, Kenneth Boulic, primero llamó al Plan para comunicarse conmigo, allí le informaron de mi situación y me llamó a mi casa. Me preguntó si estaba dispuesto a trabajar en la ac-tividad privada, porque ellos venían siguiendo mi actividad en Uruguay y sabían que mi idea de lo que te-nía que hacer el país en esa materia estaba en la línea de pensamiento de la empresa. Yo le dije que esta-ba dispuesto a escuchar todo y al otro día viajó desde Buenos Aires a Montevideo en avión y llegamos a un acuerdo, rechazando la oferta del Ministro.
¿Cómo valora el trabajo del Plan de ayer y el de hoy?
Habían técnicos generalistas y es-pecialistas, gente capacitada para trabajar a nivel predial, y especialis-tas, teníamos el equipo de agua, de maquinaria, de economía. Muchos destacados Agrónomos pasaron por el Plan y muchos empresarios exito-sos, referentes en la producción o la academia. Había gente con liderazgo en lo que se hacía. El mundo de hoy necesita líderes, se necesitan visio-
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