La Manuela: un negocio de engorde intensivo de novillos a capitalización

El segundo camión de novillos gordos ya se completó y sale rumbo al frigorífico. El embarcadero quedó libre. " Ya pueden empezar a desembarcar si quieren" le dijo Myriam Arrieta a los camioneros que esperaban a un costado del embarcadero.

Al poco rato Martín, uno de los hijos de Myriam, montado a caballo ya está llevando los terneros a los corrales. Cada embarque que llega se desparasita, se vacuna contra clostridiosis, se pesa, y se caravanea con el color asignado al dueño del ganado.

En el ejercicio 99/00 la firma engordó más de 1600 animales, todos ganados a capitalización. Myriam se ha propuesto engordar 2000 animales en esta zafra. Para lograrlo no solamente hay que producir y consumir el pasto eficientemente sino que el predio debe abastecerse de 2000 terneros y novillitos.

Los precios bajos, problemas climáticos y el creciente endeudamiento, han determinado que Myriam al igual que otros productores que tenían un fuerte énfasis en la agricultura, haya buscado otras opciones productivas, reconvirtiendose a la producción de carne intensiva

"Abriles la portera nomás, vamos a llevarlos al potrero 14A". La pesada se terminó, el promedio de los terneros estuvo en 154 kilos. "La primavera ha sido buena y el campo está tapado de pasto que se debe aprovechar, esa es una de las patas de negocio, la otra más de largo plazo es buscar la manera de desarrollar relaciones duraderas con criadores que aseguren continuidad y estabilidad al negocio de capitalización." comenta Myriam mientras ve irse los terneros para el campo. "Este lote tiene que salir gordo para dentro de un año, tenemos que cumplir con las metas o la cosa se complica".

Los primeros años

En total la firma Arrieta explota 1083 hectáreas en dos fracciones, una propia y otra arrendada. El campo propio, "La Manuela", tiene en total 649 hectáreas subdivididas en 20 potreros, todos de muy alta fertilidad con un índice Coneat promedio de 180.

El establecimiento arrendado, "Viento y Agua", tiene 434 hectáreas, de menor fertilidad y está a 18 kilómetros de distancia.

En el primero vive Myriam con Martín, uno de sus hijos. En el segundo establecimiento vive Nicolás, el otro hijo, con su familia.

El cuadro 1 muestra el uso del suelo en el área de pastoreo y el cuadro 2 el inventario de ganado de la pasada primavera.

Cuadro 1: Uso del suelo (Area de pastoreo)
 
 -
La Manuela
Viento y Agua
TOTAL
Raigrás
222
70
292
Avena, Raigrás y Lotus
32
32
Trigo, Raigrás y Lotus
60
60
Raigrás y Lotus
80
80
Praderas
115
115
Campo natural
35
319
354
 -
933

 

Cuadro 2: Inventario de ganado a octubre de 2000
 
 
Cantidad de animales
Unidades Ganaderas
Ganado propio
57
57
Ganado a capitalización
1699
1256
Novillitos
921
553
Novillos
778
703
TOTAL
1756
1313

El negocio ha ido cambiando con los años. Myriam recibió La Manuela en 1984 iniciando una explotación mayoritariamente ganadera pero haciendo unas 100 hectáreas de trigo por año. Desde el primer año se integró al grupo Crea La Carolina, formado mayoritariamente por productores agrícolas. "Yo era sola y sin experiencia; los hijos eran chicos, el Grupo para mí ha sido siempre fundamental; con él aprendí del negocio y encontré apoyo para tomar muchas decisiones difíciles", asegura Myriam.

En 1995, considerando el aumento de los precios del trigo, las buenas expectativas que surgían en ese momento y la necesidad de aumentar el volumen de la facturación, se tomó la decisión de aumentar el área dedicada a la agricultura. Con los hijos ya integrados a la explotación se compró una sembradora y una fumigadora para hacer siembra directa. En 1997 se plantaron 304 hectáreas de trigo y de cultivos de verano y arrendaron las 434 hectáreas de Viento y Agua.

El campo arrendado se tomó prioritariamente para aliviar la carga ganadera de La Manuela entre setiembre y marzo, permitiendo cerrar potreros en verano, cosechar semilla fina y aplicar glifosato. La carga del mismo se completó con ganado a capitalizar.

El cuadro 3 presenta la evolución de las áreas dedicadas a la ganadería y a la agricultura y también la evolución de los indicadores de productividad.

Cuadro 3. Evolución de uso del suelo y de los indicadores de productividad
 
 
93/94
94/95
95/96
96/97
97/98
98/99
Area de pastoreo has. 
430
350
300
258
UG Totales
533
240
310
Producción kgs. carne total/ ha
226
190
217
266
Carne vacuna/ UG
251
277
222
Agricultura
Trigo hectáreas
80
110
188
232
304
190
Trigo kgs / ha
2.350
3.300
3.528
4.034
3193
3816

Pero lo que había parecido una decisión acertada –el aumento del área agrícola- en base a las tendencias que se manejaban, desembocó en una situación difícil de manejar.
A los muy bajos precios se sumaron problemas climáticos que afectaron la calidad de los trigos y el endeudamiento que se había generado para adecuar el equipamiento. El cuadro 4 muestra los efectos de estos fenómenos sobre la estructura financiera de la empresa.

Cuadro 4. Evolución de activos y pasivos (en miles de dólares)
 
 Activos
95
96
97
98
99
00
Total con tierra
829.5
872.5
850.7
875.6
823.3
895.5
Pasivo Total
113.6
105.7
141.8
283.6
311.8
324.2
Patrimonio
715.8
766.7
708.9
591.9
511.5
571.2
Activo sin tierra
184.8
227.8
206.0
300.9
248.6
246.5
Patrimonio sin tierra
71.1
122.0
64.1
17.2
-63.2
-77.7
Pasivo/Activo %
14
12
17
32
38
36
Pasivo/Activo sin tierra %
62
46
69
94
125
132

Decisiones al borde del abismo

A principios de 1999 era evidente que había que tomar una decisión sobre la orientación del negocio. La empresa había llegado al límite del endeudamiento que podía soportar. Un año más de déficit y el daño hubiese sido irreversible.
A la hora de tomar una determinación, la familia junto a Ana Iewdiukow, la asesora del grupo, comenzaron a evaluar nuevas alternativas productivas.

Surgió así un modelo de invernada intensiva, con metas precisas de producción, ingresos y costos que permitirían hacer frente a las obligaciones bancarias. Los criterios eran, primero que los ingresos del modelo propuesto permitieran cubrir todos los costos operativos, los retiros familiares y el servicio de deuda, y segundo que no hubiera que recurrir al banco generando un mayor endeudamiento.

"La propuesta fue aprovechar al máximo la capacidad de producir pasto del establecimiento, usando una combinación de Raigrás para el invierno y de Lotus para verano y otoño- recuerda Myriam- los números daban si se lograba producir mucho pasto y muy barato."

Los costos directos de producción de forraje manejados fueron de U$S 40 por hectárea para verdeos y de U$S 60 para praderas. El presupuesto de oferta y demanda de forraje permitía pensar que se podía lograr la productividad de carne necesaria para balancear las finanzas de la empresa.

El cuadro 5 presenta un presupuesto de egresos y las metas de animales que era necesario engordar para cubrirlos, bajo dos supuestos de ingresos generados por cada animal engordado. El problema que también se planteó en aquel momento era conseguir suficiente cantidad de ganado en los momentos oportunos, ya que se debía lograr la máxima dotación posible.
 

Cuadro 5. Presupuesto y flujo de caja hasta el año 2007 (en miles de dólares)
 
 
00/01
½
02/03
03/04
04/05
05/06
06/07
Gastos fijos
60
60
60
60
60
60
60
Pasturas  
20
20
20
20
20
20
Sanidad animal
4
4
4
4
4
4
4
Reservas forraje  
20
20
20
20
20
20
Subtotal
64
104
104
104
104
104
104
Gastos familiares
16.2
16.2
16.2
16.2
16.2
16.2
16.2
Servicio de deuda
46.2
53.0
74.7
50.9
38.4
36.1
4.1
Total de egresos
126.4
173.2
194.9
171.1
158.6
156.3
164.3
Total por hectárea
117
160
180
158
146
144
152

Myriam recuerda los criterios manejados entonces …." Como al banco no se le quería pedir más plata, la alternativa elegida fue conseguir ganado a capitalización. Las metas eran ambiciosas ya que había que lograr productividades de carne por hectárea que se acercaban a los 500 kgs por hectárea de agricultura forrajera y de 300 kgs en el total del establecimiento, para poder cumplir los objetivos y pagar el presupuesto.

Las cuentas que sacamos por ejemplo, era que para animales que pesaran 250 kilos al entrar y logrando un margen bruto de US$ 100 por cabeza, había que llegar a engordar 1700 novillos. Si en cambio el peso de entrada fuera de 200 kilos por animal y se lograra un margen bruto de US$ 130 por cabeza, entonces el presupuesto se cumplía en engordando solamente 1300 animales por año."
 

Invernada intensiva

Muchas veces los números dan en el papel, pero luego la realidad dice otras cosas.

Esta premisa parece no haberse cumplido en el caso del establecimiento La Manuela ya que los resultados al cierre de ejercicio al 30 de junio de 2000 mostraron que las metas propuestas casi se habían logrado en el primer año.

Se produjeron 313 toneladas de carne lo que significó casi 290 kilos por hectárea en el total del establecimiento, a pesar de la gran sequía del último verano. Los campos naturales bajos y las aguadas en Viento y Agua salvaron al predio de un desastre cuando La Manuela se había quedado sin pasto y sin agua.

Se utiliza un sistema de pastoreo en franja diaria muy exigente.

Myriam, sus dos hijos y un empleado se encargan de andar todos los días atrás del ganado, vigilando la utilización del pasto, presupuestando el forraje y decidiendo los cambios de potreros.
La propia Myriam nos realiza algunas puntualizaciones con respecto al manejo de la invernada…." Aunque la tecnología de siembra directa ayuda a tener piso firme, lo que evita que el ganado se entierre, igualmente cuando llueve mucho hay que acelerar el ritmo de rotación para evitar destrozos a las pasturas. Se hace un seguimiento estricto de las ganancias de peso del ganado. Todos los meses se pesan en cada lote grupos de control y grupos testigo para monitorear problemas sanitarios.

Preferimos recibir terneros recién destetados, de entre 130 y 150 kilos de peso, ya que son las categorías más eficientes para transformar pasto en carne. En La Manuela el ganado se maneja en 3 lotes de unos 400 animales cada uno.
La carga instantánea del lote de terneros es de 400 animales cada 2 hectáreas. Para los novillos más grandes se maneja una carga de 400 cada 3 hectáreas en primavera y cada 4 hectáreas en invierno.

Además de los aspectos productivos, se deben atender los temas del abastecimiento de la reposición y el control de entradas y salidas de ganado. Cada lote al entrar se caravanea con un color según el dueño, se pesa y se desparasita.
Esto que parece tarea sencilla, en nuestro caso lleva bastante tiempo porque son más de 100 embarques que salen y entran por año y que se deben controlar".

El negocio de capitalización

En un negocio de capitalización el dueño del ganado prefiere la situación en la cual los animales engordan rápido y existe una razonable relación entre el valor del kilo de novillo y el kilo de ternero. Para el dueño del campo en tanto es importante la cantidad de kilos totales producidos y el precio del novillo gordo.
La clave del negocio pasa a ser entonces la obtención de un equilibrio entre la velocidad de engorde y la productividad por hectárea.

Al iniciar el negocio Myriam pagó derecho de piso antes de descubrir el precio adecuado. Los primeros contratos a principios de 1999 se hicieron a una relación 50/50. Luego se dio cuenta que era demasiado buen negocio para el dueño del ganado, considerando las buenas ganancias de peso diarias y subió su porcentaje hasta llegar a una proporción de 60/40.
A partir de agosto de 2000 los negocios se empezaron a pactar a 70/30. También se comenzó a trabajar bajo una modalidad diferente, por la cual se le asegura al dueño del ganado un mínimo de ganancia de 5 kilos por cada mes que los animales permanecen en el establecimiento. Esta modalidad parece conciliar el interés del dueño del ganado por aumentar la velocidad de engorde con el interés del dueño del campo por aumentar la productividad por hectárea.

"Una de las claves de este negocio es producir mucha carne por ha. y la otra es conseguir suficiente cantidad de ganado, de buena calidad y en el momento deseado. En nuestro país aun no existe la costumbre de consolidar cadenas de abastecimiento a largo plazo. En general son negocios de oportunidad.
Nosotros estamos tratando de lograr vínculos más permanentes con quienes nos abastecen de ganado, creo que los buenos resultados que estamos logrando van a ayudarnos a conseguirlo" afirma Myriam.

Los riesgos

En el horizonte de la empresa aparecen una serie de incertidumbres.
Se sabe que la variabilidad de los ingresos depende de la producción de forraje que se pueda lograr y del correcto manejo de la hacienda para aprovecharlo al máximo, pero también y de manera muy significativa, de los cambios en los precios relativos entre el ganado de reposición y el ganado gordo.

Las variaciones en los precios relativos del ganado pueden afectar de dos maneras. El precio final del ganado gordo influye directamente en el ingreso, ya que es el único producto vendido. Pero además, si el precio por kilo del ganado de reposición sube mucho por encima del precio del novillo gordo, se puede dar un cambio en los términos contractuales de la capitalización, modificando la proporción de los kilos producidos para cada una de las partes.

Se sabe que si la relación de precios es muy favorable a la reposición y aparece una fuerte presión demandando terneros, los dueños del ganado pueden ver deteriorados sus ingresos en este tipo de negocio y buscarían otras opciones.

Otro factor que puede cambiar los términos contractuales en el mercado de capitalización, o lo que es lo mismo el precio del servicio de engorde, es que cambie la oferta y la demanda de terneros.
La disminución de las áreas agrícolas puede derivar en que varios productores se inclinen por la alternativa de la invernada, constituyéndose en competidores directos de la empresa.

En La Manuela esta situación no se desconoce, e incluso se han hecho cuentas muy ajustadas analizando los márgenes correspondientes al dueño del ganado y a la empresa, de acuerdo a la relación de precios flaco/gordo y al precio final del kg.de novillo gordo.

Para este análisis se considera que entran a capitalizar 1600 terneros de 140 kilos; 3% de mortandad y un flete US$ 4 por ternero.
Se venden 1550 novillos de 420 kilos, variando su precio entre U$S 0,70 0,80 y 0,90 el kg. libre de gastos.

Contrato 70/30 de 1600 novillos
 
Precio por kilo de novillo (dólares)
 -
0,70
0,80
0,90
Precio por ternero
Margen del criador
Inversión en terneros
120
44.640
79.360
114.080
192.000
140
12.640
47.360
82.080
224.000
160
-19.360
15.360
50.080
256.000
Margen del invernador
 -
212.660
243.040
273.420

Contrato 60/40 de 1600 novillos (valores en dólares)
 
Precio por kilo de novillo
 -
0,70
0,80
0,90
Precio por ternero
Margen del criador
Inversión en terneros
120
75.020
114.080
153.140
192.000
140
43.020
82.080
121.140
224.000
160
11.020
50.080
89.140
256.000
Margen del invernador
 -
182.280
208.320
234.360

Los dos cuadros muestran como varían los incentivos para el criador de acuerdo a la variación de precios.

Al preguntarle a Myriam qué podría pasar si los precios cambiaran reconoce que algunos criadores podrían preferir vender los terneros en el mercado y no llevar más a capitalización, pero su filosofía es clara …"Este es un negocio de confianza y nos interesa hacerlo con criadores que entiendan los beneficios en el largo plazo".

"Sin duda hoy se nos plantean una serie de interrogantes sobre el futuro de nuestro negocio, nuestra prioridad es cancelar la deuda y con nuestro esquema de trabajo actual lo estamos logrando. Pero no desconocemos las amenazas que pueden aparecer, en ese sentido tenemos que procurar agregarle cada vez más valor a nuestro servicio, puede ser a través de contratos con la industria asegurando el abastecimiento consistente de ganados de buena calidad que puedan asegurar un sobreprecio, puede ser mediante la ampliación del área para mejorar nuestra escala, en fin son alternativas que iremos manejando".