La pérdida de peso de un animal
se considera de fundamental importancia ya que constituye la mayor determinante
del peso de la carcasa; además de ser el peso la base de la transacción
comercial del ganado.
Los momentos del día en que el ganado pastorea se relacionan con el amanecer y la puesta del sol. Esto determina una fluctuación diurna en el peso vivo y variaciones diarias a través de todo el año. Naturalmente, tan pronto como a los animales se les suprime de agua y alimento, éstos comienzan a perder peso; pero realmente ya pueden estar perdiendo peso en razón de la fluctuación normal del mismo. Los cambios en el llenado intestinal tienen una gran influencia sobre el peso. En el ganado adulto, el contenido intestinal puede significar entre el 12 y el 22% de su peso vivo. Los principales factores que determinan
el peso del intestino lleno son: el volumen de agua bebida, la cantidad
y calidad del alimento, el tiempo transcurrido desde la última comida
o bebida, y la tasa de pasaje del contenido intestinal.
El tipo de pastura y la madurez de la misma afectan el porcentaje de llenado intestinal, observándose un incremento del llenado a medida que disminuye la calidad y la palatabilidad del alimento. El ganado que pastorea o es alimentado con forrajes groseros, tiene un mayor porcentaje de su peso como "contenido intestinal" con respecto al que tiene una dieta en base a granos. El llenado intestinal disminuye en forma proporcional al porcentaje de granos en la dieta, y la longitud del período de racionamiento lo aumenta. Los animales pierden peso más rápidamente durante las primeras 12 horas de la supresión de agua y alimento; después de las cuales la tasa de pérdida disminuye progresivamente. Lo que significa que gran parte de la pérdida de peso ocurre generalmente antes que los animales abandonen el campo, especialmente si se les ha encerrado previamente al transporte. En la figura No. 1 se pueden observar los padrones de pérdida de peso vivo hasta las 72 horas para animales que han permanecido sin alimento y agua durante el proceso de venta. Estos valores son similares para aquellos animales que solamente tienen acceso al agua.
![]() Muchas veces los ganados tienen acceso en forma intermitente a alimento y/o agua durante su negociación. En esta situación se han reportado pérdidas de alrededor del 9% después de 3 días, y del 10% luego de 5 días. La tabla No.1 indica los promedios
de pérdidas de peso hasta las 72 horas para animales de diferente
peso vivo.
Se recomienda suprimir alimento y agua al ganado entre 6 y 8 horas antes del embarque, así viajarán mejor , se facilitará el manejo y llegarán más limpios a destino. Naturalmente, el ganado estará privado de agua y alimento durante el transporte, por lo que las pérdidas ulteriores son inevitables. Por tal motivo se deben evitar demoras innecesarias entre el encierre de los animales y la venta. Generalmente, el factor tiempo es más importante que la distancia del viaje del ganado. El suministro de agua, siempre que sea posible, durante el proceso de la venta, es la llave para reducir las pérdidas de peso, mientras que el suministro de heno y/o sal con el agua, reducirá las pérdidas posteriores. RECUPERACIÓN DE PESO En Australia se considera muy importante
el manejo de los animales con destino a venta para el campo o a feedlots.
RESUMEN Una transacción de ganado exitosa depende en parte de : consignar animales tranquilos, saludables, mochos, planificar el envío, prácticas de manejo compatibles con el bienestar de los animales. Obviamente esto condiciona la percepción de un precio razonable como recompensa. Gran parte de las ganancias cosechadas durante la cría, selección y engorde del ganado de carne, se pueden perder en el corto período de la venta. Estas pérdidas financieras pueden atribuirse a las pérdidas de peso, muertes, machucamiento, sanciones y disminución de la calidad de la carne. El stress reduce la concentración de glicógeno muscular, por lo que la concentración inadecuada de este elemento a la faena, conduce a carnes más duras, más oscuras, más secas y con una vida media más corta. El peso de la carcasa, dentro de varios parámetros de gordura constituye al fin la base de la comercialización, cualquiera sea la forma de ésta (primera, segunda balanza o simple venta en feria). Por otro lado una carne de buena calidad presenta múltiples opciones y asegura muy buenos resultados industriales. Algunas recomendaciones prácticas a tener en cuenta para minimizar las pérdidas:
Informe elaborado por el Ing. Alfredo Irigoyen – Instituto Plan Agropecuario a partir de material técnico de la Dirección de Ganadería y Carnes del Estado de Queensland Australia publicado en "Australian Poll Hereford Magazine" No 67.
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